Hoy en día las consecuencias del cambio climático son visibles en nuestro planeta, incluso mucho más de lo que se pudo imaginar en algún momento de la historia.
La temperatura va en aumento, y por ello nos encontramos experimentando diversos patrones de alteraciones y precipitaciones que son alarmantes para los científicos, siendo la causa principal de todos ellos la contaminación.
Afortunadamente, aún estamos a tiempo de luchar en contra del cambio climático, ya que es responsabilidad nuestra preservar el planeta para las futuras generaciones y disminuir los efectos del consumo energético al medio ambiente.
Por ello, los gobiernos y empresas están tomando un papel importante en la lucha para contrarrestar el cambio climático, debido a que son los que disponen de medidas, acuerdos o sanciones para lograr una buena eficiencia energética en España, evitando la propagación del mal uso de los recursos.
Hay que tener presente que salvar el planeta comienza por cada uno de nosotros, y para ello existen muchas maneras de aportar un granito de arena a la mejora del medio ambiente.
¿Has pensado cómo poner tu granito de arena en tu rutina diaria?
Todos podemos aportar de una u otra forma para la preservación de la eficiencia energética, ya que cada uno de nosotros somos responsables de nuestros actos. ¿Por qué tener la calefacción a tope en invierno con la ventana abierta? ¿Es necesario? ¿Por qué tener todas las luces encendidas en la casa cuando hace rato que estás en otra habitación?
Preguntas tan sencillas, pero que nos hacen pensar claramente que la mayoría de las veces sin darnos cuenta estamos contribuyendo y generando daño al ecosistema.
Tenemos que tomar consciencia del poder que tenemos como consumidores y así mismo actuar con mucha responsabilidad. Además, reduciendo el consumo energético de nuestra vivienda estaremos ahorrando dinero.
Viaja de manera sostenible
Millones de personas cada día tienen que utilizar algún medio de transporte para ir al trabajo, a la escuela o a realizar cualquier otra actividad.
El problema de ello es cuando las distancias por recorrer son largas, debido a que el mejor medio es el automóvil y éstos emiten gases de efecto invernadero, los cuales destruyen la atmósfera.
Una de las opciones más rentables es la de utilizar el transporte público, de manera que contribuimos a reducir las emisiones. También hay personas que deciden utilizar bicicleta o patinete, dejando en casa el coche. Estas opciones son un excelente método para hacer ejercicio y mejorar tu organismo.
Reduce el consumo de energía en casa
Una forma excelente para la reducción de la contaminación es ser más eficiente en el uso de la energía en el hogar.
El total de consumo de energía asciende a los 42 millones de toneladas equivalentes de petróleo en el sector doméstico. Por tal razón, en el momento de comprar una vivienda es importante conocer cuánto consume esta energéticamente.
Para ello, existe el certificado energético de una vivienda, el cual aporta un listado de recomendaciones sobre la mejora de la eficiencia de energía en el hogar.
¿Qué tipos de energía se consumen en casa?
- La tercera parte del consumo de energía en el hogar lo supone la electricidad, que a su vez es producida en centrales térmicas, nucleares o removibles, las cuales queman carbón, petróleo o gas, originando contaminación.
Solo un pequeño porcentaje en la sociedad son los que usan electricidad procedente de paneles solares, siendo estos últimos la mejor opción a usar.
- Butano y propano, que son gases licuados del petróleo. Empleados en las cocinas, producción de agua caliente y calefacción.
- Gas natural, siendo la energía doméstica de rápido crecimiento y supone una sexta parte del consumo total de un hogar.
¿Qué es el Certificado Energético?
El certificado de eficiencia energética, conocido también como certificado energético, es un documento en el cual se informa, objetivamente, sobre el consumo energético de un inmueble, y se incluyen en él una serie de recomendaciones para mejorar la eficiencia energética, en unas condiciones de funcionamiento y ocupación normales.
Este certificado energético vivienda es imprescindible para vender o alquilar un inmueble.
La etiqueta energética es la que refleja todos los resultados del certificado en la calificación energética de la propiedad. Esta se clasifica de mayor a menor eficiencia desde la A hasta la G.
Se otorgan dos tipos de calificaciones, una que es según el consumo y la otra según las emisiones de CO2. Es obligatorio por Ley que la etiqueta energética figure en cada anuncio que se publique referente al inmueble para que el futuro comprador o inquilino pueda comparar consumos energéticos de diferentes inmuebles.
¿Por qué se necesita un Certificado Energético?
Desde el 1 de junio del año 2013, es obligatorio para toda persona que desea vender o alquilar su vivienda poner a disposición de los futuros compradores o inquilinos el certificado de eficiencia de energía del inmueble.
El documento tiene una validez de 10 años, por lo que al transcurrir este tiempo se debe de renovar teniendo en cuenta cualquier mejora que se haya realizado en la vivienda desde entonces.
Hay multas que van desde los 300 euros hasta los 6.000 euros para aquellos propietarios que anuncien el inmueble, vendan o alquilen sin contar o proporcionar el certificado de eficiencia energética a las personas interesadas en la propiedad. En Madrid, como en otras Comunidades Autónomas, ya se ha sancionado por no cumplir con la normativa de eficiencia energética.
Este certificado debe de ser realizado por una persona que sea completamente competente, como es el caso de un arquitecto, un ingeniero o ingeniero técnico, el cual se encargará de analizar la envolvente térmica del inmueble y cada una de sus instalaciones térmicas asociadas.
¿Cómo se obtiene un Certificado Energético?
El proceso habitual de certificación energética consta de realizar una visita al inmueble para así poder tomar cada uno de los datos y mediciones, realizando un análisis de la envolvente térmica y de cada una de las instalaciones térmicas. Para ello se realizan mediante los programas homologados provistos por el Ministerio de Energía.
Luego se darán una serie de propuestas al propietario sobre las mejoras energéticas de la eficiencia de la casa y se procederá a la redacción del documento.
La inscripción obligatoria en el registro competente es habilitada por cada comunidad autónoma.
¿Qué pasa cuando se consume más energía?
La consecuencia más visible de un alto consumo energético es, obviamente, la repercusión económica y la segunda es el aumento en las emisiones de CO2 que terminan en la atmósfera.
El Real Decreto 235/2013, de 5 de abril, es el que regula la certificación energética de inmuebles usados en España y el que responde a todas las directivas europeas sobre lo que tiene que ver con la eficiencia de energía en la edificación.
El objetivo europeo de la reducción de las emisiones de CO2 es un hecho que se quiere no a tan largo plazo, ya que el compromiso de cada estado es reducir por lo menos el 20% de estas emisiones.
Así mismo, el cambio climático es algo que preocupa a todos los países de mundo, debido a que los recursos son limitados y el ritmo de vida actual es rápido e insostenible.
Por ello, con las actuaciones para mejorar la eficiencia de la energía en una edificación y contando con un certificado energético, contribuimos a marcar un punto de inflexión.
Cosas que puedes hacer en tu día a día para luchar contra el cambio climático
1. Dile adiós a tu coche
Cuanto menos tengas la necesidad de utilizar el coche será mucho mejor. Así como ya te mencionamos puedes optar por ir en bicicleta o caminar a lugares donde las distancias no sean tan extensas.
De esta manera, reducirás las emisiones de CO2 que son sumamente contaminantes y nocivas para el bienestar y salud del planeta.
Para distancias más largas, usa el transporte urbano.
2. Recicla
En muchos lugares debes de haber escuchado u observado a personas realizando esta beneficiosa actividad, ya que debería ser prácticamente un deber obligado en todos los hogares.
Esto con la finalidad de contribuir al ahorro de la materia prima, de los recursos naturales, económicos y energéticos.
Con la realización de actividades de reciclaje se disminuye la emisión de gases invernadero emitidos, debido a la fabricación del plástico.
Además, hay que optar por no comprar nada que sea plástico, que es uno de los principales causantes de la contaminación ambiental.
3. Practica las tan conocidas y beneficiosas 3R
Reducir, Reutilizar y Reciclar. Así como es importante el hecho de reciclar los objetos, también es conveniente no tener o adoptar un estilo de vida consumista.
Para ello hay que reutilizar todos los objetos que más se pueda, rompiendo con la obsolescencia previamente programada y apostar por el hecho de querer darle una segunda oportunidad y vida útil a los objetos.
4. Usa eficientemente el agua
Muchas personas de manera inconsciente y despreocupada desperdician este recurso vital para la vida de todas las especies que vivimos en el plantea.
El agua es el recurso más valioso que nos brinda la tierra y no hacemos un uso adecuado de este. Por ejemplo, un ejemplo de derroche de este recurso es cuando nos duchamos, donde pueden llegar a perderse decenas de litros.
No cuesta nada cerrar el grifo y abrirlo en los momentos que realmente sea conveniente.
También existen personas que encienden la lavadora para solo lavar 2 prendas, gastando agua y a la vez electricidad, pudiendo esperar a tener más ropa y así realizar una sola lavada beneficiosa.
Y como éstas, muchas más acciones inconscientes desperdician este vital recurso, que es tan limitado en algunas zonas del planeta.
5. No abuses de la utilización de la calefacción y del aire acondicionado
Para esto debes de revisar la potencia eléctrica, procurando que tu hogar esté aislado y así mismo asegurarte de no dejar encendida la calefacción todo el día.
Puedes incluso pensar en el futuro, apostar por lo que se conoce como el autoabastecimiento energético para tu hogar, lo que te resultará mucho mejor y, sobre todo, más económico. Puedes consultar entre las diversas ayudas y alternativas que existen en nuestro país.
6. Invierte en electrodomésticos que te permitan ahorrar energía
Para esto te recomendamos comprar modelos que posean etiquetado energético de clase A, los cuales vienen adecuados por tamaño y de acuerdo a las prestaciones de tus necesidades.
Así mismo, utiliza el lavavajillas o la lavadora solo cuando estén llenos, garantizando de esta forma la limpieza y el mantenimiento adecuados en cuanto a su rendimiento óptimo.
Puedes optar también por una nevera más pequeña, ya que el frigorífico se encuentra representando entre el 10 y el 15% de toda la energía que es consumida en el hogar.
7. Cambia las bombillas
Cambiar la iluminación de toda la casa por bombillas LED garantizará una mejor eficiencia de energía, debido al hecho de que consumen aproximadamente un 80% menos de energía a comparación con las incandescentes y duran hasta 11 veces más.
De esta forma, estaremos reduciendo la emisión anual de CO2 a la atmósfera.
8. Di no a los envases que no puedan reutilizarse
Todos los envases que son desechables como, por ejemplo, aquellos que suelen ser empleados en las tiendas para llevar el café, contribuyen de gran manera al cambio climático, puesto que su composición de plástico es un material no biodegradable que debe de ser evitado en la medida de lo posible.
Por ello, actualmente muchas compañías han optado por cambiar los envases de sus productos a otro tipo de material que no sea plástico. No en vano, Francia fue uno de los que destacó por ser un país que prohibió los vasos, platos y cubiertos de plástico.
9. Cambia tu dieta por una dieta vegetariana
El cambio que se realiza al pasar de una dieta omnívora a una dieta vegetariana podría reducir en gran manera la huella de carbono de una persona en aproximadamente un 28%, ya que se evitaría la emisión de aproximadamente 0,8 toneladas de gases de efecto invernadero que producen estos animales y van directamente a la atmósfera.
Pequeñas acciones son las que marcan la verdadera diferencia, por ello debes ayudar a preservar el bienestar ambiental. Aún estás a tiempo de contribuir y hacer algo en contra del cambio climático.
Puedes participar en alguna actividad en tu zona con la finalidad de fomentar el reciclaje, proponer alternativas saludables, luchar en contra de la deforestación, realizar campañas en pro del reciclaje.
Todas estas acciones el planeta te las agradecerá y, por tanto, será de beneficio para las futuras generaciones.
¿Qué hacer para ahorrar energía en el hogar?
En la cocina
- Al comprar cualquier tipo de electrodoméstico, escoge aquellos que tengan
una etiqueta de calificación energética A o A+.
- Mantén siempre desenchufados de la corriente todos los aparatos que no requieran de estar conectados continuamente.
- No dejes abierta la puerta de la nevera o congelador y asegúrate de que cierre bien.
- No introduzcas alimentos calientes dentro de la nevera.
- Utiliza lo menos posible el horno y el grill. Para ello, en su lugar, usa el microondas.
- Hierve sólo la cantidad de agua que sea necesaria.
- No abras la puerta del horno cuando este se encuentre encendido y comprueba siempre que cierre bien.
- Elige un horno que posea ventilación forzada.
- Emplea sartenes adecuados al tamaño de los quemadores de tu cocina y usa siempre las tapas cuando cocines.
- Descongela la comida a temperatura ambiente y con antelación suficiente, evitando utilizar el microondas para ello.
- Lava los platos con agua fría, no utilices el calentador para realizar esta tarea.
- Utiliza el lavavajillas a plena carga y a ser posible con los programas económicos.
- Si te vas a ausentar algunos días de tu casa, apaga el calentador de agua caliente.
- Controla la presión de cada uno de los grifos para reducir el consumo o instala aquellos que son de consumo reducido, ahorrando de esta manera agua caliente y por lo tanto energía.
- Ajusta la temperatura del agua caliente a uno 45ºC.
La sala de estar
- Instala difusores o lo llamados interruptores bidireccionales.
- Sustituye las bombillas de filamento incandescentes por otras que generen un menor consumo o por lámparas fluorescentes compactas.
- Desconecta la TV, el DVD, el equipo de música o cualquier otro aparato eléctrico para evitar los llamados consumos fantasma.
- Utiliza un ventilador de techo en vez del aire acondicionado.
- En época de verano, cierra las persianas y cortinas durante el día, y procede abrirlas de noche para refrescar las habitaciones.
- En invierno usa cortinas largas con la finalidad de impedir la pérdida de calor.
- Ajusta la calefacción entre 17 y 22 grados.
- No cubras los radiadores.
- Utiliza un reloj temporizador para que se apague, automáticamente, el router de internet cuando no lo utilices. Por ejemplo, mientras duermes.
Cuarto de baño
- Lava la ropa con agua fría y utiliza los detergentes adecuados.
- Carga de manera completa la lavadora en cada lavado, pero ten presente no sobrecargarla y mantén siempre el filtro limpio.
- Tiende la ropa al aire libre, en vez de usar la secadora.
- Plancha la ropa que necesites a menor temperatura.
- Instala una alcachofa de ducha que sea de flujo reducido.
- Coloca un tapón al lavabo, evitando que se vaya agua por el desagüe, con esto ahorras agua y energía para calentarla.
- Desenchufa todos los aparatos de los enchufes.
- Utiliza el secador de cabello en la opción de menos calor.
- Si el cuarto de baño no tiene ventana con luz natural, instala un sensor de movimiento que encienda y apague la luz dependiendo de tu presencia.
- Utiliza WC con dos depósitos de agua a utilizar el de menos consumo de agua según se requiera.
Dormitorios
- Apaga todas las luces al momento de salir de la habitación.
- Utiliza temporizadores de pulsador y sensores de luz
- Sustituye los fluorescentes viejos por unos que sean más modernos, de mayor rendimiento y sobre todo de menor consumo.
- Usa la manta eléctrica solo como calentador momentáneo y pon una manta en la cama.
Jardín y piscina
- Instala interruptores programables y bidireccionales, así como también sensores
de movimiento y de luz de día.
- Asegúrate de que los niveles de iluminación son adecuados y que las luces se apaguen cuando no sean necesarias.
- Instala puntos de luz incandescente de 120 W.
- Comprueba que el tamaño del sistema de filtrado y el de instalación son los correctos.
- Procura que el agua que está en la piscina se caliente por energía solar en vez de por gas o electricidad.
Calefacción
- Aísla la casa, es decir, el techo, paredes y suelos a ser posible.
- Sella todos los huecos alrededor de las puertas y ventanas para impedir la formación de corrientes.
- Utiliza suelos que sean de losas de cemento y material pesado de construcción en el interior, puesto que esto absorbe y guarda el calor durante el día, reduciendo su pérdida por la noche.
- Instala cortinas gruesas que se ajusten entre sí, para reducir la fuga de calor por las ventanas.
- Cierra la habitación que estés calentando.
- La calefacción por radiación es una buena opción para habitaciones grandes
en las que las personas no realicen mucha actividad.
- La convección forzada calienta antes el aire y es apropiado para estancias donde la gente se mueva mucho.
- Los paneles y las columnas rellenos de aceite se calientan lentamente, siendo los más recomendables para todas las habitaciones pequeñas durante largos periodos de tiempo.
- Los sistemas de conducción, como el caso de las mantas, transmiten el calor por contacto, por lo que son adecuados para el uso personal.
- Las bombas de calor absorben el calor gratuito del exterior y lo ceden al interior de la vivienda.
Aire acondicionado
- Lo mejor para ellos es incorporar medidas de ahorro energético en el diseño
de la vivienda.
- Instala grandes ventanas en el lado sur de la casa y redúcelas en la parte norte.
- Diseña puertas interiores con aberturas que permitan pasar la brisa.
- Proporciona sombra adicional a las ventanas que lo requieran.
- Selecciona plantas de exterior que proporcionen frescor.
- Evita el pavimentado o el hormigón delante de las ventanas para evitar que el calor que reflejan vaya hacia la casa.
- En los días más cálidos cierra puertas, ventanas, cortinas, toldos y persianas, para evitar de esta forma que entre el calor y sólo ábrelas a primera hora de la mañana y por las noches, para que el calor pueda salir.
- Cierra las habitaciones que no estés usando para mantener más fresca la casa.
- Elige bien qué tipo de aparato de refrigeración vas a usar:
– Ventiladores: son los objetos ideales para habitaciones bien aisladas. Con estos el gasto de energía es más bajo.
– Evaporadores: Se usan para climas secos y son más caros, pero los costes de electricidad son bajos.
– Aire acondicionado: Su precio es el más alto y gasta enormes cantidades de energía. Si lo usas, mantenlo en el lado más sombreado de la casa, y orienta las tablillas de salida de aire siempre hacia el techo y mantenlo a una temperatura razonable.
– Bomba de calor reversible: Su precio es más barato que el anterior y con un nivel de ruido y gasto energético menor.
En conclusión, hemos de tomar consciencia del poder que tenemos como consumidores. Nuestras acciones pueden ayudar a luchar contra el cambio climático y pueden colaborar para conseguir un mundo mejor para todos. Piensa y cuestiónate qué haces en tu rutina diaria. Pregúntate qué consumes y cómo lo consumes. Luego, analiza si puedes conseguir tu fin de un modo distinto, más eficiente y, en definitiva, mejor para ti y para todos.
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