En esta nueva era, de tecnología, avances científicos, estudios climáticos a profundidad, sostenibilidad económica, política y ambiental, hemos ido descubriendo y lentamente entendiendo que éste es el momento de empezar un cambio en el mundo, pues ya se ven las heridas que nuestras malas prácticas como habitantes hemos infringido al planeta.

El problema no son solo las heridas del presente, ya que capacitándonos podremos curarlas o al menos reducir el daño. Lo que nos preocupa ahora son las cicatrices que no se irán y que son irreversibles, y la única forma de enfrentar este miedo es deteniendo los procesos y evitando el deterioro de nuestro planeta.

Cada continente, país o ciudad participa de una u otra forma en prácticas nocivas para el planeta. La acción del hombre, el progreso y la intención de mejorar las condiciones de vida, son las causas principales de la contaminación ambiental que estamos sufriendo, y lo que antes no se sabía o no “queríamos ver” ha saltado de una forma abrupta a nuestra vista. A causa de acciones contaminantes, intencionadas o no, la fauna se ha visto afectada, con cientos de especies en peligro de extinción. La escasez de lluvia o agua contaminada reduce el crecimiento normal de las plantas o la extinción de las mismas. La contaminación del aire, que da como resultado el calentamiento global, estimula los cambios bruscos de clima, ascenso del nivel del mar, aumento de temperatura, proliferación de enfermedades, entre otros.

Por estas y cientos de razones más, se está creando conciencia de compromiso con el mundo. Por ejemplo:

• Reutilizando y reciclando papel.
• No dejando correr agua de forma innecesaria, inclusive existen mecanismos para acumular el agua de lluvia.
• Buscando opciones de aislamiento de calor o frío en las construcciones, para no utilizar electricidad en exceso.
• Reemplazando los focos o lámparas por otros de mayor eficiencia energética.
• Apagando o desconectando aparatos electrónicos (los que no necesitan estar conectados siempre).
• Utilizando baterías recargables
• Usando pañales, bolsas plásticas y plásticos en general, de una manera consciente.

Estos pocos ejemplos se pueden poner en práctica desde casa, son consejos fáciles de seguir en nuestro día a día. Pero la idea es que los cambios se den en grande, empresas, fábricas, constructores, transportes masivos, etc. Empezar a utilizar energía natural e inagotable, que sea capaz de regenerarse por sí misma, como es la energía renovable y sus diferentes clasificaciones: energía solar, eólica, hidroeléctrica, geométrica, biocombustibles.

Poco a poco los cambios ya se están dando, y existen muchas propuestas interesantes para continuar con este compromiso. Otras ya se han puesto en marcha y están aportando buenos resultados. Hay países que están tomando en serio este convenio con el planeta, e incluso han creado leyes y normativas de ahorro y cuidado energético, como es el acertado ejemplo del certificado de eficiencia energética o certificado energético. Se trata de un documento oficial redactado por un técnico competente que incluye información objetiva sobre las características energéticas de un inmueble. Este documento califica el inmueble calculando el consumo anual necesario en la demanda de agua caliente, calefacción, iluminación, refrigeración y ventilación. Se emite un certificado de eficiencia energética con una calificación de 7 letras, siendo A la que corresponde al edificio más eficiente, hasta la G el menor. Este certificado energético es obligatorio y al ser algo tan importante, constructores o dueños de inmuebles saben el valor que tiene para su venta o alquiler, y de la misma forma quién lo va a adquirir.

Dicho todo esto y mencionando la importancia de salvar lo que nos queda, hemos hecho una recopilación de 10 ciudades eficientes en el consumo energético, sin ningún orden específico, pero sí citando uno que otro ejemplo que las caracteriza por destacarse a la hora de ahorrar en energía. Te presentamos un top 10 mencionando lo que han hecho para tener este distintivo:

1. Vancouver (Canadá)

Canadá se sitúa a la vanguardia de la industria de energía renovable en todo el mundo y Vancouver es una de las ciudades canadienses que participan en este proceso, por esto y varios factores más, es considerada un modelo de ciudad verde. El Gobierno y los ciudadanos trabajan constantemente para convertir su ciudad en la más verde del planeta, presentando una serie de propuestas, tomando en cuenta todos los factores que puedan beneficiar a los ciudadanos y visitantes y por supuesto, la idea principal, encontrar el mayor provecho para el medio ambiente.

Algunos de sus proyectos puestos en marcha desde ya tiempo atrás son: La energía eólica, la cual no requiere ningún tipo de combustible más que convertir el aire en movimiento en energía eléctrica. Es una de las de más rápido crecimiento anual con un 60% desde 1988. Existen varias empresas dedicadas a la energía eólica y éstas generan a su vez una gran cantidad de puestos de trabajo.

En esta ciudad llevan años trabajando por una propuesta de sustituir los transportes contaminantes por bicicletas, teniendo un excelente resultado. También es la pionera en la creación de un proyecto para el 2020, basado en construir edificios de carbono neutral. Tienen una de las mejores y más largas redes de carril bici del mundo.

2. Melbourne (Australia)

Melbourne, la antigua capital de Australia, está situada en la costa sureste. Es una ciudad reconocida por el deporte y la cultura. Por su alto nivel de calidad de vida y bajo nivel de pobreza, ha sido catalogada como una de los mejores lugares para vivir. Su país le ha otorgado el nombre de ciudad jardín, por la diversidad de especies de plantas y flores que se encuentran en sus numerosos parques. A pesar de ser una ciudad con mucho tráfico, en donde todavía la preferencia es el transporte privado, se ha centrado en la creación de opciones no contaminantes, representando así otro de los casos mundiales en que se está haciendo un maravilloso trabajo en el desarrollo de adaptación, de eficiencia en el consumo energético.

Ha creado un programa que se denomina “1200 edificios de Melbourne”. Consiste en la reforma de 1200 edificios. Los propietarios presentan a una entidad de crédito, una solicitud para la realización de mejoras medioambientales, y éstas entran en un proceso de evaluación y calificación de dicho crédito.

Es una excelente iniciativa, ya que los edificios con mayor valoración medioambiental o con certificado energético, generan menores costes de funcionamiento y se revalorizan, así los que van quedando atrás empezarán a hacer adecuaciones y remodelaciones en los suyos, con el fin de entrar en competencia y gozar de una buena plusvalía.

Si todos los países del mundo pudiéramos contar con un plan de cambio ambiental como éste, prolongaríamos significativamente la vida de la tierra.

Video (en inglés) que explica el programa de los 1200 edificios de Melbourne

3. Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos)

Esta moderna y lujosa ciudad caracterizada por sus altos edificios, es la segunda más poblada de los Emiratos Árabes Unidos y la más rica. Se encuentra en una isla al sureste del Golfo Pérsico. Los ingresos se obtienen, en su gran mayoría, de las finanzas, el turismo y la producción de petróleo, de hecho es uno de los mayores productores del mundo.

Sus construcciones son verdaderas obras de arte, la belleza junto con la tecnología ecológica que poseen desde hace años, han situado a esta ciudad como una de las más eficientes en consumo energético del mundo. Pero la razón principal por la que está en los primeros puestos de ciudades “verdes” es por el grandioso proyecto Masdar, la ciudad inteligente 100% ecológica en donde todo gira en torno a la protección del clima y los recursos naturales. Su construcción empezó en el 2008, y sigue en curso.

Esta ciudad será autosustentable y pretende liderar la producción y utilización de energías renovables. La energía será solar, promoverá el transporte en bicicleta y estará completamente adaptada para que la gente pueda desplazarse caminando por toda la ciudad, también se está creando un transporte subterráneo de energía no contaminante. Los alimentos serán orgánicos y reciclarán agua mediante aparatos inteligentes de racionamiento.

4. Copenhague (Dinamarca)

Esta majestuosa ciudad, centro de comercio por su privilegiada ubicación en el punto más importante entre el mar Báltico y el norte de Alemania, se caracteriza por sus diseños arquitectónicos y es una ciudad con una alta calidad de vida, posiblemente la mejor para vivir.

Copenhague es una ciudad tranquila, ordenada y segura, quienes la visitan o viven ahí, la disfrutan por largos paseos a pie o en bicicletas, pues es una de las ciudades europeas donde este transporte reina en las calles. Los turistas que no están acostumbrados a ver tanto ciclista, se impresionan al llegar por primera vez de visita, más tarde entienden que ver ciclistas es uno de los sellos principales de este sitio. Lo anterior y su esfuerzo por el medio ambiente, la convierten en otra ciudad pionera en sustentabilidad ambiental.

La ciudad se encuentra en proceso de grandes cambios con el fin de mantener el título de ciudad verde de Europa. Se están reformando los sistemas de calefacción y promoviendo el reciclaje en todo sentido. Lo positivo de todo esto es que ha logrado crear una cultura ecológica a nivel general. Quienes la habitan se adaptan a este estilo de vida, tanto es así que las turbinas del parque eólico Middelgrunden se financiaron con aportaciones de los ciudadanos.

Copenhague ha presentado cientos de eficientes proyectos de consumo energético y su ambición en este importante tema ambiental va muy lejos, ya que es otra de las ciudades que quiere llegar a ser libre de carbono neutral.

Middelgrunden: el parque eólico más social del mundo (artículo en video del sitio web de noticias ecológicas Twenergy)

5. San Francisco (Estados Unidos)

San Francisco, la famosa ciudad del puente Golden Gate y sus tranvías, unida a tierra firme únicamente por su extremo sur, es un centro cultural y financiero, la segunda ciudad más poblada del país. Sus lugares más conocidos son el barrio chino, la cárcel de Alcatraz, Union Square, el Conservatorio de Flores y el parque Acuático. Es también considerada una de las ciudades que aporta más cuidado al medio ambiente en el mundo.

Es precursora en políticas ambientales para la reducción de contaminación. Estas políticas inciden mucho en la reducción de residuos. En esta ciudad se prohíben en los supermercados el uso de botellas y bolsas de plástico. También ha creado una estrategia efecto invernadero de reducción de emisión de gases en transporte, sector energético y los residuos sólidos.

Sus habitantes se están educando desde hace varios años para mantener una ciudad limpia. Además existe una ordenanza que obliga a reciclar y hacer compost, y para quienes no la cumplan, las multas son altas.

Utilizan transportes no contaminantes como las bicicletas, además tienen una excelente red de carriles bici para transitar con seguridad. De la misma manera la gente ha optado por tomar el transporte público en vez de salir con sus vehículos.

El deseo de ser una ciudad completamente limpia, sumado a su belleza, forman parte de otro lugar predilecto para vivir.

 

6. Reykjavik, Islandia

Esta pequeña ciudad europea, capital de Islandia, donde en invierno solo reciben cuatro horas de luz, y en verano pasan todo el día con ella, es una ciudad limpia, verde y segura, y es grande en términos de sustentabilidad energética.

En Reykjavik más del 90% por ciento del consumo energético procede de energía hidroeléctrica y no conformes con esto, están en una dura competencia consigo mismos en llegar a tener el 100% de consumo energético. El uso de la energía renovable es masivo. Han aprovechado el gran potencial del país en ámbitos tales como la energía geotermal.

Y al hablar de transporte no se quedan atrás, ya que el transporte público masivo funciona a hidrógeno y de esta manera no emiten contaminantes.

Esta ciudad es un ejemplo claro de que no es necesario ser un país rico para poder alcanzar un objetivo como es el de cuidar el mundo en el que vivimos, sus habitantes son luchadores y entusiastas a la hora de trabajar y si quieren ser una ciudad libre de contaminación, seguro lo lograrán en su totalidad.

Sitio web oficial de la planta de energía geotérmica de Nesjavellir, otro de los impresionantes esfuerzos de esta ciudad islandesa para alcanzar la completa eficiencia energética.

http://www.mannvit.com/GeothermalEnergy/GeothermalPowerPlants/GeothermalProjectNesjavellir/

7. Ciudad del Cabo (Sudáfrica)

Ciudad del Cabo es la segunda ciudad más poblada y capital legislativa de Sudáfrica.

Es famosa por su puerto y por su gran biodiversidad, además de que la ciudad goza de una gran ubicación que le permite ser el hogar de miles de especies, pero varias de ellas están en extinción. Tiene más de 30 reservas naturales, incluyendo el Parque Nacional Montaña de la Mesa.

En el 2010 adoptó un completo Plan de Energía y Acción por el Clima, un programa que vincula la energía y el clima a la estrategia de desarrollo de la ciudad. La ciudad está comprometida a la reducción del consumo de electricidad y a conseguir hasta el 2020 que un alto porcentaje de la energía sea renovable y limpia.

Ciudad Del Cabo lleva varios años reacondicionando sus edificios de manera que no contaminen la ciudad. Los calentadores de agua se están reemplazando por solares. Y algo que indiscutiblemente resalta en esta ciudad, es su sistema LED ahorrador de alumbrado, que incluye la iluminación de todos los semáforos de la ciudad.

Pues ya sabemos, que si queremos conocer un lugar diverso en flora, fauna, y que a la vez sea cosmopolita y se preocupe por mantener el medio ambiente, ciudad del Cabo es una gran opción de destino.

8. Curitiba (Brasil)

Esta ciudad de clima subtropical húmedo, se ha llevado el título de la ciudad más verde de América del Sur y ello no es sólo porque la ciudad está llena de parques, bosques, plazas y espacios públicos, todos bien provistos de vegetación, sino por sus esfuerzos en materia de uso eficiente de la energía.

Cuenta con 120 carriles para bici, pues 7 de cada 10 personas circula en bicicleta. Sus habitantes están realmente comprometidos en mantener una ciudad ecológica y para el gobierno es fundamental que los ciudadanos estén contentos con los espacios de su ciudad. Se recicla el 70% de la basura y lo más interesante es que se creó un intercambio verde que ha dado muy buenos resultados; los habitantes de barrios pobres, tienen la opción de intercambiar sus bolsas de plástico, o basura reciclable por boletos de autobús, comida, materiales para el colegio e incluso entradas para ciertos actos sociales.

En la década de los 90, Curitiba recibió el premio United Nations Environment Program – UNEP, de la ONU, considerado el premio máximo en el medio ambiente en el mundo. Recibir un premio tan importante, seguramente motivará a esta activa ciudad a seguir con dicha campaña de conservación y mantener el puesto de ser una de las primeras ciudades verdes del mundo.

 

9. Portland (Estados Unidos)

Portland es la primera ciudad de Estados Unidos que adoptó  un plan de acción climático, tiene más torres residenciales con certificación LED de todo el país, además sus edificios han construido un sinnúmero de jardines verdes en sus techos.

Reforzó y mejoró el transporte público, animando a la población a utilizarlo, evitando en el día a día sus vehículos particulares. Creó carriles para ciclistas y se convirtió en la ciudad de más transporte ecológico sobre 2 ruedas en su país.

Una cuarta parte de la población utiliza el transporte público, comparte coche o va en bicicleta cada día, también se ofrecen sitios de estacionamiento gratuito para vehículos eléctricos. Y para quienes prefieren no tomar ningún vehículo, establecieron un proyecto que se llama “barrios 20 minutos”, que se trata de la implementación de varios comercios de servicios básicos que solo quedan a 20 minutos a pie, de manera que la gente solo necesita salir a caminar para hacer cualquier gestión que necesite, como hacer compras o ir al banco.

Los proyectos de esta ciudad que lucha por salir de la contaminación, han dado un magnífico resultado y sus habitantes cooperan por iniciativa propia, además fueron creadas leyes que los amparan.

 

10. Hamburgo Alemania

Esta bella ciudad, que es el segundo puerto más grande de Europa y que cuenta con los encantadores lagos artificiales Binnenalster únicos en su género, originarios del río Alster en la mitad de la ciudad, hace muchos años comenzó un proyecto de plantación de centenares de árboles y plantas por toda la ciudad. Construyó grandes parques y espacios públicos con el concepto “verde”, y no solo esto, sino que se está planificando la ciudad de manera que todo pueda estar conectado de forma segura, para dar un paseo caminando o en bicicleta exclusivamente, quiere decir que en unos años no será necesario tomar un transporte para conocer toda la ciudad, y el auto será un recurso cada vez menos indispensable.

Definitivamente hay muchas razones para conocer esta ciudad, pulmón de Europa. Es otro ejemplo más a seguir, en este proyecto mundial de enriquecernos con la cultura de ahorro y eficiencia energética.

Sitio web oficial de la ciudad de Hamburgo en su apartado de uso eficiente de la energía.