En la lucha contra el cambio climático y la emisión de gases contaminantes hacia la atmosfera, las energías renovables son un factor clave. A través de ellas, se puede generar energía limpia, que no contamina y utilizando recursos naturales que no se acaban, como si sucede con los combustibles fósiles. A lo largo de los años, las tecnologías han ido evolucionando, mejorando el escenario para la investigación e instalación de estas energías renovables. Para ello, son fundamentales las inversiones alrededor del mundo.

Primer semestre de 2019

Se han conocido los datos de inversiones en energías renovables en todo el planeta, gracias al informe de BloombergNEF, el cual abarca toda la información respecto al primer semestre del año 2019. De forma individual, España está en su mejor momento: es el país número uno en inversiones en Europa, con 3.700 millones durante los primeros seis meses. En comparación con el año pasado, aumentó en un 235%. España no estaba entre los líderes en energías renovables desde hace más de 10 años, cuando ocupaba ese lugar junto a Alemania.

En comparación con los otros países, los germanos invirtieron 2100 millones, lo que representa un 42% menos. El Reino Unido también presentó una disminución: 35%, sumando un total invertido de 2.500 millones. Holanda sigue la misma línea, con una inversión de 2200 millones, un total de 41% menos del año anterior. Respecto a los países que han mejorado sus números, se pueden destacar a Suecia y a Noruega, quienes también han trabajado mucho en pos de la regulación del certificado energético.

El mercado europeo no es el único que ha mostrado una baja, sino es una línea que se mantiene también en los mercados más importantes del mundo. Europa sumó una decaída del 6%. Estados Unidos también decreció, con un 4%. Sin embargo, los peores números los registró China, país que sufrió una baja de más del 35%. La suma total de inversión en el primer semestre es de 117.600 millones de dólares. Si se compara con los números de año pasado, es una caída del 14%, en su mayoría debido al país asiático. Sin embargo, no hay que precipitarse. Aún queda el resto del año, y tampoco hay que negar los avances que se han logrado. Por ejemplo, diez años atrás, las sumas apenas superaban los 60.000 millones.

Hay que resaltar las cosas positivas del informe. Se espera una mejora en el mercado chino, anunciado por Justin Wu, el jefe de Asia-Pacifico de BNEF (siglas de la empresa BloombergNEF) quien dijo: “La desaceleración de la inversión en China es real, pero las cifras para el primer semestre de 2019 probablemente exageran su gravedad. Esperamos que se lleve a cabo una subasta de energía solar en todo el país para generar una nueva financiación de proyectos fotovoltaicos. También prevemos varias grandes ofertas en energía eólica marina en la segunda mitad del año”.

Nuevos Mercados

Hay dos proyectos gigantes, tanto en infraestructura, cantidad de energía e inversión que se han puesto en marcha en este semestre. Ambos abren nuevos mercados en energías limpias, algo muy alentador y esperanzador en la lucha contra el cambio climático.

El primer proyecto es un complejo solar térmico y fotovoltaico en Dubái, llamado Mohammed bin Rashid Al Maktoum IV. Se espera que este complejo genere más de 950 MW de energía una vez que esté terminado. Su costo es de aproximadamente 4200 millones de dólares, los cuales se dividen en dos partes: 2600 millones aportados por distintos bancos, tanto chinos como occidentales, y otros 1600 millones de capital provenientes de la Autoridad de Electricidad y Agua de Dubái. En lo que respecta al sector de energía solar, es la operación financiera mas grande que haya existido hasta la actualidad, combinando tres tipos de captación de la energía: fotovoltaica, tecnologías térmicas de canal y torres parabólicas.

El segundo proyecto, o proyectos, tienen que ver con instalaciones de energía eólica marina en la costa de Taiwán. Estas construcciones, llamadas Wpd Yunlin Yunneng y Ørsted Greater Changhua, generarán 640 MW y 900 MW de energía respectivamente, y constituyen una inversión conjunta de 5700 millones de dólares. La energía eólica marina es un mercado que está en crecimiento y ha aumentado su rango de acción. Ya se estaba utilizando en la costa de China y en el Norte de Europa, pero ahora se incluyen nuevos sectores geográficos, como el propio Taiwán, India, Vietnam y la costa este de Estados Unidos.

La energía fotovoltaica en España

La energía fotovoltaica es una de las principales fuentes de energía renovable que se utilizan. Este tipo de energía consiste en captar la energía del sol, limpia e infinita, a través de paneles solares. Mediante un sistema de corrientes, toman la energía solar y la transforman en energía eléctrica, que se vierte en la red y se utiliza normalmente.

Este tipo de energía ha crecido tanto en España que, en el pasado mes de agosto, se ha superado por primera vez en la historia los 1000 GW de generación de energía. La cifra exacta fue de 1066 GW, y superó el record, que había sido establecido un mes antes. El ritmo de crecimiento es muy bueno, y según los datos que aporta la Red Eléctrica, la potencia instalada en total es de 5817 MW. Si se toma como parámetro agosto de 2018, ha aumentado un 19% (el total en ese momento era de 4714 MW). De cara al futuro, se espera que el ritmo se mantenga, e incluso que se aumente, ante las peticiones de instalación que ya se están dando y las condiciones favorables para el desarrollo de la energía renovable y también de la obtención de un certificado energético.

Sin embargo, no todo es positivo. El sistema eléctrico empieza a mostrar las primeras señales de saturación, ante la gran demanda de instalación de energías renovables que hay. La Red Eléctrica –REE- anunció en su sitio web el rechazo de 26,3 GW de energías renovables, que no pudieron obtener el permiso de acceso y conexión. Sus argumentos fueron la falta de capacidad en el nulo solicitado, o porque el pedido se hizo en una subestación sin planificación.

De los permisos rechazados, 5,8 GW corresponden a energía eólica, mientras que 20,5 GW son energía fotovoltaica. Esto no significa que hayan sido vetados de forma definitiva. Si llegan a conseguirse nuevos puntos de conexión, crearse o ampliarse nuevas subestaciones se puede prever la decisión, aunque lo más probable es que deban esperar al plan energético 2021-2026. Esta planificación ya está en marcha, trabajando en conjunto las comunidades autónomas, el Gobierno y el operador del sistema energético.

Al 30 de junio de 2019, en España existen instalados 28,5 GW de energía eólica y fotovoltaica combinadas. Además, ya se han aceptado permisos para la instalación en los próximos años de 18,8 GW de energía eólica y 43,6 GW de energía fotovoltaica. Pero eso no es todo: restando los permisos que se han negado, aún existen 56,6 GW de energía a la espera de saber su futuro.

Sumando todos los números, España cuenta con un potencial de 119 GW de energía eólica y fotovoltaica para ser instalada en los próximos años. Sin contar futuros nuevos permisos que se pidan. Son números importantísimos, y demuestran el crecimiento y la importancia que han tomado las energías renovables en el país.

Autos eléctricos en España

La organización Transport & Envirnonment, con la ayuda de la consultora IHS Markit, ha publicado un estudio sobre el futuro de los coches eléctricos, en el que España se perfila como el tercer productor de este tipo de vehículos en los próximos años.

El estudio, llamado ‘Electric surge: Carmakers’ electric cas plans across Europe 2019-2025” detalla que para el 2025, Alemania y Francia liderarán el rubro de coches eléctricos, seguido por España. Según el análisis, se espera que, durante ese periodo de tiempo, la producción de vehículos ambientales aumente en un 11%, lo que correspondería a 500.000 unidades, mientras que los vehículos tradicionales disminuirían en 300.000 unidades, aproximadamente un 7%.

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Las razones de este posicionamiento tienen que ver con las condiciones favorables de la industria automotriz. En España, hay 6 marcas diferentes que tienen en sus planes fabricar 100.000 coches eléctricos cada una. Esa variedad de marcas solo es igualada por el Reino Unido, ya que Alemania y Francia solo disponen de 4, aunque el nivel de producción de cada una es mayor.

El mercado europeo estará dominado por estos cuatro países, y quizá se pueda sumar Italia. En los próximos tres años, se triplicará la oferta de modelos de vehículos eléctricos. A finales del año pasado, estaban a la venta unos 60 modelos diferentes, pero para el 2021, se espera que la variedad aumente a más de 210 coches.

Nuevos desarrollos tecnológicos

La tecnología undimotriz, la cual genera electricidad con el movimiento de las olas, es  un área que no ha sido explotada aún, principalmente por la dificultad de adaptarse al cambio del movimiento de las mareas y el oleaje del mar. Una empresa española, llamada Arrecife Energy Systems, parece haber encontrado un sistema que puede resistir todo tipo de olas y generar energía.

Su CEO, Iñigo Doria Elejoste, explicó la falta de desarrollo de esta posible fuente de energía: “muchas empresas han puesto en marcha un mismo tipo de tecnología para aprovechar los movimientos verticales de las olas con boyas flotantes, pero llevan muchos años con ese tipo de tecnología y parece que no llega a arrancar.” Además, detalló porque se diferencian de las demás: “nuestro prototipo es diferente, aprovecha tanto los movimientos verticales como horizontales mediante un sistema de turbinas colocadas en una especie de catamarán que absorben ambos movimientos”.

La primera prueba en el Mar Cantábrico fue un éxito. Se utilizó un modelo en escala de 1:3, con una potencia de 75 KW, un peso de 9,9 toneladas, trece metros de largo, tres de ancho y diez turbinas. Está diseñado para trabajar con olas de un rango entre 1 y 5 metros, pero cuenta con una función para sumergirse en caso que el oleaje supere ese tamaño y se vuelva peligroso.

La empresa se encuentra en búsqueda de financiación. A pesar de haber recibido varias distinciones y premios tanto en Europa como en Estados Unidos, encuentran dificultades para conseguir dinero y sus recursos económicos son limitados. Han recibido ayuda del gobierno vasco –lugar donde está establecida la empresa- pero no es suficiente. El objetivo es crear un dispositivo de más de cuarenta metros de largo y que alcance una potencia de 3 MW, lo suficiente para abastecer 1500 hogares.

bombillas en cadena

En la Universidad Pública de Navarra, un investigador diseñó un sistema que podría generar electricidad a través de los gases que disipa una chimenea industrial hacia la atmosfera. Utilizando este sistema, se podría generar energía para cubrir el gasto anual de 111 hogares.

El ingeniero industrial Miguel Araiz presentó este dispositivo en su tesis doctoral. Se trata de un generador termoeléctrico que aprovecha el calor que emana una chimenea industrial de treinta metros, la cual elimina gases a más de 250 grados, para generar 363 MW de electricidad al año.

“Basta con lograr una diferencia de temperaturas entre las caras de los módulos termoeléctricos, el elemento esencial de estos dispositivos. Cuanto mayor sea esta diferencia de temperaturas, mayor será la potencia eléctrica generada” explicó el ingeniero. Dentro de sus posibles ventajas están: su bajo costo de producción e instalación; la ausencia de partes móviles, por lo que se elimina el mantenimiento; la generación de electricidad con cualquier salto de temperatura; la escalabilidad y la modularidad.

Sin embargo hay que aclarar que este diseño está lejos de llevarse a la práctica, por ahora es una teoría, pero que puede resultar interesante hacia el futuro.

Conclusión

Las energías renovables son un elemento fundamental si se quiere lograr un cambio en la lucha contra el cambio climático. De a poco, se está observando un cambio, tanto en el aumento de inversiones en las energías limpias, la obtención por parte de hogares y empresas de un certificado energético, como en la búsqueda de avances tecnológicos. Por ejemplo, en lo que va de año España ha mostrado un enorme crecimiento en energía fotovoltaica. También se están abriendo nuevos mercados de energías renovables, como por ejemplo Dubái o Taiwán. La lucha para mejorar el medio ambiente es larga y no se debe detener.