25 consejos para ahorrar agua y energía en el hogar

escrito por somoseficiencia

El consumo de agua caliente sanitaria (ACS) representa la cuarta parte de la energía que gastamos en una vivienda convencional (26%).

El agua es un recurso indispensable para todos los seres vivos y hay motivos para pensar que es previsible en nuestro país un aumento de la demanda de agua: la mitad del territorio sufre sequía, la población aumenta y el cambio climático amenaza con reducir aún más la frecuencia de las lluvias. Desde el año 2006, en vivienda de nueva construcción, es obligatorio contar con sistemas solares térmicos para la generación del ACS.

GRIFERÍA

1. No dejes funcionar el grifo. Mientras te cepillas los dientes, te afeitas o mientras te estás lavando las manos. En verano, no dejes el grifo abierto para que se enfríe el agua. Pon una jarra o botella en el frigorífico. Racionaliza el consumo de agua y no dejes los grifos abiertos inútilmente.

2. Un grifo mal cerrado es un coste elevado e inútil de agua. Los goteos y fugas de los grifos pueden suponer una pérdida de 25 litros de agua al día, ¡evítalos! 1 gota por segundo equivale a 9.000 l/año. Si además el agua está caliente, se está derrochando energía.

3. Si todavía tienes grifos independientes para el agua fría y caliente, cámbielos por un único grifo de mezcla (monomando). Regulan mejor la temperatura, no gotean y pueden ahorrar hasta un 50% del consumo, los hay con apertura en dos fases, que logran ahorros aún mayores que los grifos monomando tradicionales.

4. Usar perlizadores o aireadores (reductores de caudal) en los grifos hace que se inyecte aire en la salida de agua haciendo que la sensación de caudal sea la misma y reduciendo 30-60% el consumo de agua, ¡y de la energía para calentarla!

5. Independientemente del sistema de producción de ACS utilizado, ajusta la temperatura de confort a la salida de los grifos entre 30ºC y 35ºC es suficiente para sentirse cómodo en el aseo personal. La temperatura necesaria para lograr un nivel adecuado de higiene y de confort basta con que sea 3 ó 4 grados superior a la corporal, una temperatura superior a 40º C constituye un gasto innecesario.

¿Es excesiva la temperatura de distribución del agua caliente? Muchos edificios emplean agua caliente más caliente de lo necesario. Una reducción de 10ºC supone un ahorro del 15% de la energía.

6Cuidado, 1 grifo abierto consume alrededor de 6 litros por minuto. En el caso de la ducha, este consumo se incrementa hasta 10 litros por minuto. Un grifo abierto drenando agua caliente sin ningún  objetivo más que la relativa comodidad de no cerrarlo, es una de las mejores formas de derrochar nuestro dinero.

DUCHA

7Tenga en cuenta que una ducha consume del orden de cuatro veces menos agua y energía que un baño. Dúchate en vez de bañarte. Un baño equivale en agua y en energía a 4 duchas. Una ducha de 5 minutos consume unos 30-40 litros de agua, para llenar una bañera ¡se precisan entre 120 y 160 litros, con el consiguiente gasto adicional de combustible.

8. El agua fría inicial desperdiciada hasta que sale caliente, suele ser de entre 2 y 8 litros. Antes de que el agua salga caliente, puedes recogerla con un cubo/cubeta los primeros litros de agua fría para fregar los platos, el suelo, descargar el inodoro o regar las plantas. Se coloca debajo de la llave de agua mientras esperas a que el agua de la ducha se caliente.

9Podemos conseguir un bajo consumo de energía y agua con un termostato en la ducha. Nos permite reducir el agua al no tener que esperar con el grifo abierto mientras se calienta el agua. El termostato nos permite regular la temperatura deseada sin necesidad de reajustarla cada vez que abramos el grifo.

10. Emplear cabezales de ducha de bajo consumo, permite disfrutar de un aseo cómodo, gastando la mitad de agua y, por tanto, de energía. Son los llamados reductores de caudal que, además de ahorrar agua, conllevan un importante ahorro energético, ya que consigue cerrar el grifo para enjabonarse y volverlo abrir con el agua a la misma temperatura.

11Toma duchas más cortas. Si deseas obtener un fuerte control en esto, fija un temporizador.

INODORO

12. El inodoro no es una papelera, úsalo de forma racional. El inodoro es uno de las instalaciones más intensivas en el uso del agua en tu casa, así que no lo descargues si no es necesario.

13. Los sistemas de doble pulsador o de descarga parcial para la cisterna del inodoro ahorran una gran cantidad de agua. Hoy, la capacidad habitual es de 6 litros y las descargas parciales permiten gastar sólo 2 ó 3 litros en cada descarga.

14 Introduce dentro de la cisterna una botella de plástico llena de arena o de agua. De este modo, se reduce el volumen de agua liberado, consiguiendo además un llenado del depósito mucho más rápido.

15Si es amarilla, déjala tranquila.  Si es marrón, descárgala.

FREGADERO

16. Pon el tapón del fregadero al fregar para reutilizar el agua y apagar el grifo mientras enjabonas la vajilla. Si se llena el fregadero con agua y un poco de jabón, sólo serán necesarios unos 20 litros para limpiar los platos. En lugar de hacerlo, llena un lado con agua limpia y el otro lado con agua jabonosa. Si no tienes un fregadero doble, utiliza un cubo o balde para el agua limpia.

17. Reutiliza el agua de cocción. ¡No viertas el agua hirviendo de la pasta o las verduras por el desagüe! Deja que se enfríe por completo, y podrás utilizar esa agua en tu jardín.

18. Reutilice los platos. ¿Necesitas lavar la taza cada vez que se vierta una bebida? Escoge un vaso para el día, y úsalo durante el mismo.

19. Evita descongelar los alimentos poniéndolos bajo el chorro de agua; es preferible sacarlos del congelador la noche anterior.

CON LOS ELECTRODOMESTICOS

20. Evita las medias cargas. No hagas funcionar el lavavajillas o la lavadora hasta que tenga las cargas completas. Aprovecha al máximo la capacidad del lavavajillas y de la lavadora: ahorrarás agua, detergente y energía y alargarás la vida del electrodoméstico. Recuerda que 2 lavados a media carga consumen más que un lavado a carga completa.

21. Reutiliza las toallas (¡y usa esos pantalones vaqueros de nuevo!). Realmente sólo necesitas cambiar tus toallas de baño una vez a la semana,  y puedes usar los pantalones vaqueros varias veces antes de lavarlos. No sólo vas a ahorrar agua, sino van a durar más tiempo, ya que el lavado es una de las causas de desgaste.

JARDIN

22. Elige plantas adaptadas a nuestro clima que no consuman demasiada agua.

23.  Riega por la mañana temprano o a la caída de la tarde, cuando el agua tarda más en evaporarse. Cuando riegas durante las horas más calurosas del día, se pierde agua por evaporación. Si estás preocupado por el moho, mejor regar por la mañana.

24. Limpia terrazas, balcones y patios con una escoba en lugar de usar la manguera. Plantéate el riego por goteo.

25. Recoge el agua de lluvia para regar. Si disponemos de un jardín, existen en el mercado depósitos pluviales que recogen el agua de los canalones y los acumulan para utilizarlo en el riego. Tendremos que tener en cuenta los materiales utilizados en las cubiertas para no contaminar el agua. Además de reutilizar el agua de las pluviales, aportamos a nuestro jardín un agua de calidad, dulce y sin cloro.

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