Sistemas de Gestión de Energía ISO 50001: Gestionar ahorros

Una de las formas más efectivas de ahorrar en nuestra factura energética es realizar una Gestión Energética de las instalaciones de nuestra empresa u organización.

Puede parecer imposible a primera vista como gestionar nuestras instalaciones consumidoras de energía pero, afortunadamente, contamos con una herramienta que nos facilita enormemente esta labor: la norma UNE-EN ISO 50001 (Sistemas de Gestión de la Energía = SGE).

La norma ISO 50001 sustituye al UNE EN 16001 sobre Sistemas de Gestión Energética y su última actualización es de Noviembre del 2011.

El objetivo de esta norma internacional es facilitar a las organizaciones (de cualquier tipo) a establecer los sistemas y procesos necesarios para mejorar su desempeño energético, incluyendo la eficiencia energética y el uso y el consumo de la energía. Con ello se pretende reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y los costos de la energía a través de una gestión sistemática de la energía.

La adopción de esta norma no es obligatoria pero puede suponer una enorme ventaja en la gestión de los recursos propios de nuestra organización. Además, de un tiempo a esta parte se han abierto adjudicaciones de obras y servicios de las Administraciones Públicas, donde uno de los requisitos a puntuar o valorar es la tenencia de una certificación en la ISO 50001.

Esta norma, como las normas ISO de gestión (ISO 90001, ISO 14001,...), se basa en el ciclo de Deming de “Mejora Continua” o lo que es lo mismo: Planificar, Hacer, Verificar y Actuar.

Pero ¿cuál es el proceso para implantar un Sistema de Gestión de la Energía?

Básicamente, los pasos a dar podrían ser los siguientes:

• Planificar: Realizar una revisión energética y establecer la línea base, y los indicadores de desempeño energéticos (IDEn’s), objetivos, metas y planes de acción necesarios para entregar los resultados que resultan en mejorar el desempeño energético de acuerdo con la política energética de la organización;
• Hacer: Implementar los planes de acción enfocados a la gestión energética.
• Revisar: Supervisar los procesos de medición y las principales características de las operaciones que determinan el desempeño energético ante la política y los objetivos energéticos, e informar los resultados;
• Actuar: Tomar acciones para la mejora continua del desempeño energético y del SGEn.