10 consejos de ahorro con el sistema de ACS en el hogar
La producción de ACS conlleva un consumo energético. Este consumo depende de las dimensiones de los edificios o viviendas. Al margen del porcentaje de producción de agua caliente sobre el consumo total , es necesario tener en cuenta una serie de medidas de ahorro y buenas prácticas en estas instalaciones de generación.
1. En una instalación de producción y distribución de ACS es necesario limitar las temperaturas máximas de almacenado y distribución para reducir las pérdidas térmicas del conjunto de la instalación. Puede ahorrarse entre un 4 y un 6% de energía con los reguladores de temperatura con termostato.
2. En la elección del sistema de producción de agua caliente, además de fijarte si es un sistema instantáneo o con acumulación, recuerda, que los equipos más eficientes son las calderas de condensación con gas natural y si tienen depósito de acumulación, mejor.
3. Es muy importante que los depósitos acumuladores y las tuberías de distribución de agua caliente estén bien aislados. Un tanque de almacenamiento así como las tuberías aisladas pueden presentar un ahorro de calor de un 70%.
4. Es necesario tener en cuenta el recorrido que debe realizar el agua desde el punto de generación hasta el punto de consumo. Cuanto más largo sea el recorrido de las tuberías, más pérdidas hay, por lo que lo más adecuado es que dicha distancia sea lo más corta posible. Como acción economizadora, puede individualizarse la producción y distribución del agua caliente de los locales que se encuentren alejados de la central térmica.
5. Importante establecer correctamente las dimensiones del depósito de almacenado. La capacidad de acumulación debe calibrarse para que todo el volumen se caliente en al menos en tres horas. De este modo, el generador de calor trabaja a máxima potencia durante más tiempo, reduciéndose el número de paradas y arranques.
6. En el conjunto de conducciones que discurren en locales térmicamente no acondicionados, pueden existir as perdidas térmicas horarias. Éstas no deben superar el 5% de la potencia útil instalada.
7. El intercambiador, el depósito y las tuberías de distribución, tienen pérdidas. Para reducirlas es necesario aislar adecuadamente, disminuyendo así en un 10%-30% el consumo de energía.
8. Pueden instalarse dos bombas de retorno cuando la potencia de bombeo sea superior a 5 kW. El montaje se realiza en paralelo, quedando una de ellas en reserva.
9. En el acumulador, la temperatura máxima del ACS debe ser de 58 °C. La distribución, en cambio, debe ser a una temperatura máxima de 50 °C. De este modo se disminuyen las pérdidas de calor en las tuberías de distribución. Para temperaturas superiores, el galvanizado de depósitos y tuberías se detiorará probablemente y casi con seguridad que aparecerá cal. A temperaturas inferiores a 58 ºC en un acumulador se facilita el crecimiento de Legionella.
10. Algo más sofisticado para ahorrar en agua son los sistemas de detección de fugas de agua. A través de un sistema domótico, es posible controlar de manera continua las posibles fugas de agua no visibles, supervisando constantemente las conducciones. Con este sistema logramos evitar pérdidas de agua y daños en la vivienda por humedades, filtraciones, goteras, etc.