Quien está manejando los precios del certificado energético?

escrito por somoseficiencia

Existen inmobiliarias, sociedades de tasaciones, EMVS (empresas municipales de vivienda y suelo), entidades bancarias y webs de certificaciones de ámbito nacional, que empiezan a posicionarse muy fuerte marcando el precio medio del certificado energético.

1. En el caso de las inmobiliarias, (zona Levante) mediante su convenio existente de colaboración con arquitectos técnicos, ofrecen el certificado energético al precio pactado entre la inmobiliaria y el técnico certificador. En este caso, queda en manos de dicho técnico el ofertar su trabajo según manda la ley Omnibus. Nada que objetar, a pesar de que el precio que van manejando es de 1,5 €/m2.

2. Las sociedades de tasaciones, como por ejemplo TINSA, según nos hemos informado, afirman con rotundidad que el certificado energético costará a partir de 150 €, sin contar las tasas administrativas. Se trata de una de las fuertes empresas que ofrecen este documento dentro de sus servicios.

“El propietario del inmueble se deberá encargar de contratar a un profesional (de TINSA) que realizará la calificación y, posteriormente, de registrar dicho documento en un registro de su comunidad, adquiriendo así el carácter de certificado.”

También, el Gabinete de Tasaciones Inmobiliarias, S.A., Sociedad de Tasación homologada por el Banco de España, ofrece un doble servicio de tasación y certificación energética, con el consiguiente ahorro de costes.

3. Por otra parte, en algunos municipios como Madrid, los propietarios de viviendas inscritas en un Servicio Municipal de Alquiler (SMA) cuentan con un nuevo servicio a su disposición. La Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS), se ha anticipado y ha puesto en marcha un servicio propio de certificación para todas las viviendas inscritas en el SMA. Los Técnicos de la EMVS han recibido formación específica para ofrecer este servicio a las viviendas inscritas en el SMA. El precio fijado es de 181,5 €. y de momento, esta posibilidad sólo se ofrece únicamente a las viviendas inscritas en el SMA, incrementando así los servicios prestados a los propietarios. En Madrid, el SMA ya gestiona 19.547 viviendas, en las que se alojan 47.160 personas.

4. La situación actual del mercado inmobiliario ha provocado que las entidades bancarias sean ahora una de las mayores inmobiliarias del país. Actualmente algunas de ellas han aportado parte de dichos inmuebles al denominado “banco malo” o SAREB. Otras han creado el suyo propio  o lo gestionan a través de sus propias inmobiliarias.  Solvia (Banco Sabadell), Anida Inmobiliaria (BBVA), Altamira (Santander), Aliseda (Banco Popular), Servihabitat (La Caixa), etc.

Los bancos pueden contar con el asesoramiento específico en materia de eficiencia energética sobre edificios, reafirmando su posición frente a la competencia como una empresa involucrada en el ahorro energético. Así como en la materialización de las medidas de mejora, en su caso.

Pretenden externalizar toda la gestión de la obtención de Certificaciones Energéticas de Edificios Existentes, para concentrar la actividad en la salida comercial de los activos inmobiliarios.

5. Mención aparte lo que está ocurriendo entre las redes de certificación nacionales que realizan subasta de precios a tiempo real. Son los técnicos los que pujan por realizar la certificación energética de un inmueble. Esto ya es lo último de lo último. Puedes indagar en la red, están ahí.

En somoseficiencia, sin dar nombres, queremos transmitir nuestra indignación con este tipo de recurso mediático que claramente se aprovecha de la falta de trabajo de todos los profesionales implicados en este sector. Pan para hoy y hambre para mañana. Aún no ha entrado la ley en vigor, aún no hay mercado, aún no hay conciencia energética en el ciudadano, aún no hay recursos económicos para realizar mejoras,…pero ya sabemos que el precio del certificado energético tiende a “cero”. Reflexionemos también si nosotros como técnicos tenemos parte de culpa de lo que aquí está pasando. Si no marcamos unos mínimos de dignidad en nuestros trabajos profesionales, nadie decente y trabajador, saldrá de esta crisis dentro de la “crisis”.

Comparte esta información