El precio justo por su Certificado Energético
Desde la entrada en vigor del Real Decreto 235/2013, de 5 de abril, por el que se aprobaba el procedimiento básico para la certificación de la eficiencia energética de los edificios, los técnicos, empresas e inmobiliarias comenzaron a ofertar sus servicios para la realización de los certificados energéticos sin ningún tipo de regulación en cuanto a los procedimientos que iban a utilizar para emitir dichos certificados y en consecuencia el coste de dicho certificado. Esta situación hizo que muchas inmobiliarias ofrecieran a sus clientes una determinada clasificación energética a un coste muy inferior de lo que realmente cuesta elaborar un certificado energético real. Parece el negocio perfecto ya que el cliente obtiene su certificado con una buena calificación a un coste bajo y la inmobiliaria y su “técnico” obtienen su beneficio libre de gastos, ya que por supuesto ni se visa el certificado energético (se firma bajo declaración responsable) ni se ha visitado la vivienda para realizar mediciones y comprobar las instalaciones.
Todo esto al final se traduce en que el certificado de eficiencia energética deja de ser útil al no cumplir su función, que no es otra que calificar energéticamente cada vivienda/local de una forma objetiva en función de la envolvente térmica y de sus instalaciones, y así poder darle a un futuro cliente de la mencionada vivienda/local información real del coste energético que tendrá al adquirirla y/o hacer uso de ella. El fijar un precio mínimo es una forma de evitar que gente sin escrúpulos se dedique a poner precios irrisorios a cambio de emitir certificados que no se corresponden con la realidad, ya que es imposible que un técnico cobre 60 € por elaborar un certificado, lo vise, lo registre, y haya visitado la vivienda un mínimo de veces, sin contar que además haya recabado información en el ayuntamiento sobre los materiales de construcción que se emplearon, ¿qué ha ganado ese “técnico”?, no es creíble esta situación ya que cada producto/servicio tiene un coste y como consecuencia un precio, por lo que se ha de sospechar de los precios raramente bajos. Al final el aceptar este tipo de servicios no afecta a todos a largo plazo puesto que todos somos clientes en algún momento y no podemos ver afectado por un certificado que no se corresponda con la realidad.
El pasado 19 de noviembre de 2013, en el BOE 227, se publico la Resolución de 7 de noviembre de 2013, por la que se aprueban las tarifas aplicables por la Sociedad Estatal de Gestión Inmobiliaria de Patrimonio, SA en los trabajos relativos a la certificación y auditoría energética de bienes inmuebles. En esta resolución se fijan los precios mínimos a aplicar en los certificados de eficiencia energética y pueden servir de referencia para valorar adecuadamente estos trabajos.
Para hacerse una idea el precio del certificado de eficiencia energética que fija el BOE para una vivienda de 100 m2, es de 222,69 euros, más 20 euros de registro ante la Comunidad Autónoma correspondiente (IVA y visado no incluidos).