La gran competencia entre certificadores. El precio.
Como todos sabemos, todavía no se ha regulado un precio en ésto de los certificados energéticos.
Y es que la diferencia de precios para un mismo producto, puede ser abismal. Entiendo que la calidad en redactar un buen certificado, es imprescindible, pero existen empresas y certificadores, con los que es imposible competir, o por lo menos, competir por un producto de calidad (es imposible que en un certificado energético de 70€ IVA incluido, un técnico visite la vivienda, mida, haga la toma de datos, calcule y registre el certificado). No sé si ésto, es opinión mía pero, la mayoría de clientes, piden el certificado energético a la hora de vender, por lo que le viene indiferente la explicación del tipo de calificación obtenida, el consumo o todo lo que les podamos explicar.
Entonces... ¿por qué producto estamos compitiendo? ¿Debemos rebajar nuestros precios y a su vez las calidades del certificado? ¿cuánto le debe costar al cliente dicho certificado?. Los certificadores no nos hemos parado a hablar del tema en ningún momento y eso tiene consecuencias.
Con éste escrito lo que pretendo, no es culpar a los compañeros que van a un precio bajo o a aquellos que tienen un precio excesivamente alto para el usuario, lo que pretendo, es que se establezca un precio base o estimado del certificado, un precio PARA TODOS y con ello, hablo del técnico y del cliente, un precio que incluya todo, para ser más transparentes con el cliente y en definitiva, un precio establecido para poder competir ahora sí, por la calidad en el certificado.
Sin más, propongo crear una plataforma, o simplemente llamar la atención de todas éstas empresas online como certificadodeeficienciaenergetica.com, a la que estoy muy agradecido, para que intenten "mover los hilos" necesarios para que ésto ocurra, para que se establezcan unos precio mínimos y máximos y para que se gestione bien todo (no voy a hablar de gente no cualificada porque todos sabemos que existe). Si no nos movemos, vamos a competir por una firma, no por lo que realmente sirve, para tener una arquitectura más sostenible y un país un poquito menos contaminante.